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Por Domingo Aguilera, Enero 2019

Nos cuenta S. Mateo que los Magos, entrando en la casa, vieron al niño con María, su madre, y postrándose le adoraron.

Durante tres años los apóstoles siguen al maestro, Jesús de Nazaret. Preguntan, viajan con el Maestro,  asisten a sus milagros, ellos mismos mandan a los demonios. Son sus discípulos, han establecido una relación de maestro/discípulo. Piden y obtienen. Hacen oración.

Cuando ya está próxima la Hora, Jesús dice a sus apóstoles: (Jn, 15, 15) ya no os llamo siervos sino amigos. Y Jesús, establece una relación de igual a igual. La amistad. Darse uno a otro sin esperar nada, el amor humano más sublime. Lo que colma el corazón de todas las personas. Y charlan con el Amigo. Hacen oración.

 
Sor Lucía falleció en 2005 y desde 2017 es Sierva de Dios

Octubre es el mes del Rosario. El día 7 se celebra la festividad de Nuestra Señora del Rosario y este año además el Papa Francisco ha pedido a todos los católicos del mundo que recen a diario el Rosario y hagan una oración a San Miguel para que proteja a la Iglesia de las acechanzas del demonio.

Pero, ¿por qué rezar el Rosario a diario? ¿Qué beneficios trae al que cada día se pone a los pies de María con esta oración?  Sor Lucía Dos Santos, una de las tres videntes de Fátima dejó por escrito en un libro las respuestas a estas cuestiones.