Un espacio del hogar o de la oficina decorado con una imagen de la Virgen te cambia el día.
Una mirada a la Virgen ayuda a resituar las cosas. ¿Por qué no dedicarle un espacio de tu casa con un icono, una imagen de madera o piedra, una pintura o un vinilo? O tal vez esa pieza vintage que encontraste en un anticuario o un chamarilero.