La opción Mariana
Por Domingo Aguilera. Septiembre 2019
El cambio de era al que estamos sometidos en este principio del siglo XXI nos conduce a reflexiones profundas sobre el rumbo de la nueva civilización. Sin embargo, hay columnas que son las de siempre: y una de ellas y fundamental, es la Virgen. Ella no está sometida a la temporalidad, sino a la eternidad, y va a seguir siendo nuestra Madre por los siglos de los siglos, de ahí que la tomemos como referente fundamental en nuestra vida.
El siglo XXI está marcando una huida de la civilización occidental hacia ningún sitio. Huye de Dios y de sí misma. Es la primera vez en la historia de la humanidad que esta civilización carece de modelo. Hasta ahora, cada civilización ha mantenido o creado un modelo que le ha permitido sobrevivir y avanzar como tal.
La globalización, internet, las redes sociales han supuesto la aparición de nuevos actores, que, junto con la modernidad líquida, la ideología de género y la deconstrucción de la persona humana, hacen que el hombre, en su indigencia, se quede prendado del “like” efímero y despojado de la reflexión y de su conciencia de ser.
La humanidad aparece como abocada a su autodestrucción. Las instituciones, tan honorables y sólidas en el pasado, se resquebrajan.
Rod Dreher, en su best-seller “La opción benedictina” con el subtítulo Una estrategia para los cristianos en una nación postcristiana, presentado recientemente por toda España, parte de un análisis muy sencillo y certero: “el panorama cultural y sociológico occidental ejerce una presión cada vez mayor para que los cristianos adapten su mentalidad a lo políticamente correcto”. Y se plantea que, como en el pasado San Benito junto con unos pocos compañeros, “sólo unas minorías muy activas”, entrelazadas entre sí mediante redes de contacto, pueden aislarse y crecer para volver a reinventarse. Dreher, ve a la Iglesia compuesta por unos exiliados en su propio país.
El libro ha sido una revolución y por lo menos ha hecho reflexionar a muchos cristianos sobre su identidad y el consejo de San Pablo “No queráis conformaros al siglo presente, sino transformaos con la renovación de vuestro espíritu”.
John Zmirak, que es el autor de “The Bad Catholic’s Guide to the Catechism” y Editor Senior del diario “The Stream”, objeta que Dreher propone su opción fuera del contexto actual, dado que San Benito propone una opción para frailes. Y le ofrece una alternativa “La opción de San Josemaría”. Aunque el mensaje de San Josemaría no ha venido a resolver una situación concreta, Zmirak ve esta opción como más posible en la sociedad actual. (ver www.opusdei.org )
Y también en EEUU, una doctora en filosofía Carrie Grees en su libro “The Marian Option” con el subtítulo La solución de Dios para una civilización en Crisis, se añade a este debate proponiendo que la Virgen es la mayor productora de cultura de toda la historia y propone la belleza como un argumento apologético para el mundo actual.
Las casas hay que construirlas sobre cimientos sólidos y, estando encantado con cualquier opción de los anteriores, la mariana es para todos los públicos, de todas las edades, de todas las épocas, la mejor. Es la solución divina y la que patrocina esta web.
La creación de “minorías marianas” es una tarea accesible a cualquier católico. Comencemos por nosotros mismos. Metamos de verdad en nuestra vida a María, como hizo San José, tratándola cómo enamorados. Invitemos a nuestro cónyuge e hijos, animemos a nuestros familiares, amigos y vecinos. Sólo tenemos que ponernos y poner a nuestros seres queridos, delante de la Virgen María. Ella hará el resto. Todo un reto para el cristiano del siglo XXI.