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Patricia Navas - publicado el 04/03/22

Los obispos de Ucrania proponen rezar esta oración con el convencimiento de que la Virgen puede ayudar a resolver la situación actual

Los obispos de Ucrania proponen rezar esta oración de consagración de Ucrania y Rusia a María con el convencimiento de que la Virgen puede ayudar a lograr la paz y resolver la difícil situación actual:

Amada Reina y Madre Nuestra,
Reina del Santo Rosario, Auxilio de los cristianos,
Salvación del género humano, Virgen victoriosa:

Aquí nos postramos humildemente ante Ti,
para que lleves nuestras sinceras oraciones a Dios Todopoderoso en la Trinidad.

Venimos con la plena confianza
de que suplicamos misericordia y protección para nuestra Patria
en este tiempo dramático de guerra.

Madre de Misericordia,
te lo pedimos no por nuestros méritos, con los que no contamos,
sino en vista de la bondad infinita de Tu Corazón
y de la Sangre salvadora de Cristo, Tu Hijo.

 

Que llegue a ti el sufrimiento y los gritos de auxilio de tantas personas.
Ten piedad de los heridos y víctimas de los bombardeos, de los huérfanos y de las viudas, de todos aquellos que se vieron obligados a abandonar sus hogares
y buscar refugio en lugares más seguros.

Ruega misericordia por los que dieron su vida defendiendo al prójimo y a nuestra Patria.

¡Oh Madre Inmaculada! Ruega a Dios la gracia de la conversión,
y te pedimos especialmente la conversión de Rusia
y de todos aquellos que están cegados por el odio o la sed de poder.

Pide para nosotros en primer lugar
todas esas gracias que pueden cambiar los corazones humanos en un instante
¡y que prepararán y traerán una paz tan codiciada!
Sobre todo, danos el don de la paz espiritual
para que el Reino de Dios crezca en paz y armonía.

Reina de la paz, pide para nosotros
la gracia de la verdadera reconciliación con Dios y con los demás,
para que nos podamos echar una mano de ayuda y apoyo.

Trono de sabiduría:
Inspira a todos los gobernantes a tomar decisiones sabias
y refuerza los esfuerzos de los que contribuyen con el final de la guerra y la paz.

Reina de los Apóstoles:
Pide para nuestros pastores el don de la fe fuerte
y del celo en la celebración de los sacramentos,
para que en este momento estemos todos unidos
en la mesa eucarística y en la oración ardiente.

Cuida a los enfermos, fortalece a todo el personal médico
y a los voluntarios que atienden a enfermos y heridos,
pide su fuerza espiritual y física.
Sé salud para los enfermos, fortaleciendo a los moribundos
y consolando a sus seres queridos.

Así como la Iglesia y toda la humanidad fueron consagradas al Corazón de tu Divino Hijo,
fuente inagotable de victoria y salvación para todos,
nos consagramos para siempre a Ti y a tu Corazón Inmaculado, Madre y Reina nuestra,
para que tu amor y cuidado aseguren la victoria del Reino de Dios,
y que nuestra Ucrania y todas las naciones reconciliadas entre ellas y con Dios
te bendigan y te glorifiquen.

¡Amén!

La petición de los obispos de Ucrania al Papa

Los obispos de Ucrania también han pedido al papa Francisco que celebre un acto público de consagración de Ucrania y Rusia al Inmaculado Corazón de María, tal y como la Virgen lo pidió en Fátima a tres pastorcillos el año 1917.

«En estas horas de dolor inconmensurable y de terrible prueba para nuestro pueblo, nosotros, los obispos de la Conferencia Episcopal de Ucrania, somos portavoces de la oración frecuente y sincera, sostenida por nuestros sacerdotes y consagrados, que nos llega de todo el pueblo cristiano, para que Vuestra Santidad consagre nuestra Patria y Rusia», le expresaron.

En los últimos años, los Papas han respondido a esa petición de la Virgen consagrando el mundo a su corazón varias veces.

En una de ellas, el año 1984, san Juan Pablo II hizo una mención expresa de Rusia. Y no son pocos los que la relacionan con la caída del comunismo, iniciada en 1989.